El Pleno del Congreso debatirá y votará esta semana una iniciativa de Podemos que propone recortar el 80% del consumo de agua de regadío y ganadería hiperintensivos en manos de fondos de inversión, y así priorizar las concesiones de riego a la agricultura y ganadería familiar. Se trata de una moción consecuencia de la interpelación urgente que la formación dirigió hace una semana a la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, en ausencia del ministro de Agricultura, Luis Planas, en la última sesión de control del Congreso de febrero.
El partido morado, que estuvo la pasada legislatura en el gobierno y que ahora está integrado en el Grupo Mixto, defiende su propuesta de recorte para impulsar y apostar por la modernización de los regadíos y también para generar ayudas para facilitar el paso del regadío al secano.
Pero los morados exigen que este recorte se aplique también al sector turístico en beneficio de vecinos y vecinas de zonas afectadas por la sequía y de pequeños productores agrícolas, reconociendo en el reparto de ayudas principalmente a las zonas insulares y a aquellas provincias que se ven en mayor proporción afectadas por la turistificación.
En la iniciativa, recogida por Europa Press, plantea además aplicar una moratoria a los regadíos hiperintensivos en manos de fondos buitre y macrogranjas e impulsar un Plan Hidrológico Nacional que responda al ciclo de emergencia climática actual.
Para dar solución a los problemas del sector agrario, Podemos pide que las comunidades autónomas cumplan la Ley de Cadena Alimentaria, que es con la que se prohíbe la venta a pérdidas, y también que se elabore una ley estatal de Agricultura y Ganadería familiar. A esto se suma una propuesta para un plan estratégico integral para el sector primario y un fondo de ayuda ante la crisis climática.
Se plantea a su vez la modificación del sistema de seguros agrarios, para que se adapte a la nueva realidad climática y que se planifique la instalación de energías renovables y evitar que se ocupen terrenos cultivables.
Por otro lado, Podemos propone destinar terrenos agrícolas en manos de la Sareb a un plan de fomento de la producción social y cooperativa agrícola. A estas iniciativas en materia de suelo se añade un «mapa agronómico» actualizado, que bajo los parámetros científicos pueda servir para una redefinición de los usos racionales de la tierra en equilibrio con la disponibilidad de recursos hídricos.