En esta semana no ha habido variación en el total de agua acumulada en los embalses peninsulares españoles. Las pérdidas en algunas cuencas, sobre todo Tajo, Guadiana y Guadalquivir, se han visto compensadas por las ganancias en otras, Ebro y Miño-Sil, en una suerte de juego de suma cero en el que el resultado ha sido casi ese, un hectómetro cúbico más, que supone un 0,00% de total de los 37.154 hectómetros cúbicos embalsados. Sí hay que destacar, aunque para las cifras totales apenas tenga trascendencia, que las cuencas internas de Cataluña vuelven, por tercera semana consecutiva, a almacenar una cantidad significativa, en este caso 10 hectómetros.

La cuenca del Tajo y las grandes cuencas del sur, Guadiana y Guadalquivir, son las más perjudicadas en estos día de lluvias escasas, en forma de tormenta y que se producen principalmente en la mitad norte del país. Pero todas ellas tienen ya, con los niveles actuales, garantizado el suministro de agua, tanto para consumo humano, como para riego y usos industriales.

La cuenca del Tajo pierde 76 hectómetros, un 0,69%, y se queda en el 79,7% de su capacidad total, con 8.800 hectómetros de un total de 11.000. En el Guadiana se pierden esta semana 35 hectómetros, un 0,37%. La cuenca está al 50,6% de su capacidad, con 4.830 hectómetros de un total de 9.538. El Guadalquivir disminuye 29 hectómetros, un 0,36% y con 3.747 hectómetros de un total de 8.028, está actualmente al 46,7%.

En el lado de las ganancias, el Ebro aumenta en 101 hectómetros cúbicos gracias a las lluvias y también al deshielo del Pirineo. Gana así un 1,3% y supera ya el 75% con 5.868 hectómetros de un total de 7.802. Y el Miño-Sil, que gana 49 hectómetros, un 1,7% y supera el ya el 90% de su capacidad total, que es de 3.030 hectómetros.

Ligeras variaciones en el resto de cuencas, casi todas a la baja salvo las pequeñas cuencas del norte y sobre todo de las cuencas internas de Cataluña, que por tercera semana consecutiva registra un aumento significativo, en esta ocasión de 10 hectómetros. Con esta ganancia se sitúa ya por encima del 27%, pero con tan sólo 183 hectómetros, debido a la escasa capacidad de almacenamiento de estas cuencas. Sumado esto a la gran población a la que atienden, la situación está muy lejos de haber superado sus graves problemas.

Otra cuenca a destacar, la más baja de todas en porcentaje, es la del Segura, que pierde 5 hectómetros, ya baja del 24% y sólo tiene 271 hectómetros acumulados para sus grandes necesidades de regadío. Afortunadamente la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura (ATS), tras analizar los datos del sistema Entrepeñas-Buendía y constatar que se encuentra en nivel 2, situación de normalidad hidrológica, ha autorizado ya un primer trasvase de 27 hectómetros. Además, la aplicación semestral de la regla de explotación permite prever que el sistema se encontrará en esta misma situación durante todo el semestre abril-septiembre, por lo que podrán seguir haciéndose aportaciones durante todo el verano.