Desde hace más de una semana los agricultores y ganaderos alemanes protestan arropados por transportistas «hartos» de las políticas europeas, que lastran su competitividad y les empujan al abandono. Un descontento que empieza a contagiarse a otros países comunitarios como Italia o Francia, donde esta misma mañana la frontera en el peaje de la AP-8 en Irún se ha cerrado al tráfico pesado, en sentido Baiona, por las protestas que están realizando los agricultores franceses en la A-63, ante la posibilidad de que pueden generar un «gran atasco».
En España los tractores también calientan motores para trasladar su descontento al Gobierno y la organización Unión de Uniones ha remitido hoy a las Subdelegaciones del Gobierno afectadas la comunicación de las rutas de la tractorada que desembocará en Madrid ante el Ministerio de Agricultura el próximo día 21 de febrero, con al menos 500 tractores, para reivindicar un conjunto de medidas que permitan a los agricultores y ganaderos salvar la presente crisis.
Los tractores discurrirán por 15 provincias: Ávila, Burgos, Cáceres, Ciudad Real, Córdoba, Cuenca, Guadalajara, Jaén, Madrid, Segovia, Sevilla, Tarragona, Teruel, Toledo y Valencia, y la comunicación presentada por la organización propone la circulación por vías que agilicen el tránsito de los tractores, minimizando el tiempo de los recorridos, las interrupciones del tráfico y, por lo tanto, la seguridad. “Esperamos que las autoridades hayan aprendido de la experiencia del pasado año, cuando nos pusieron todas las trabas del mundo para desanimarnos y lo único que consiguieron fue ocasionar más molestias a los ciudadanos y más situaciones de riesgo”, señalan desde la organización.
La tractorada se convoca bajo el lema “Nos Sobran los Motivos. Defendemos el campo, defendemos la alimentación de todos” y reivindica un paquete de 21 medidas que se consideran necesarias y en las que han de participar todas las administraciones implicadas, para apoyar al sector y ayudar a los agricultores y ganaderos a salvar la crisis que arrastran, especialmente en los dos últimos años.
“No se trata solo de reclamar ayudas, aunque algunos sectores como olivar y viñedo que hasta ahora se han quedado fuera también las necesitan, sino también de defender que la Cadena Alimentaria funcione y se nos pague justamente, que se nos defienda en la frontera frente a importaciones que hace una competencia desleal, que no se nos asfixie con exigencias que no se adaptan a la realidad del campo y son meramente ideológicas, que contemos con unos Seguros Agrarios que nos protejan cuando los necesitamos, del gasóleo agrario, de la salvaguardar la sanidad de nuestra ganadería sin arruinar a los ganaderos…” explican desde Unión de Uniones.
“A los profesionales del campo nos sobran los motivos para manifestar nuestra preocupación y nuestro hartazgo”, indica Unión de Uniones, quien considera que “la reacción que se está viviendo por parte del sector en estos últimos meses, con manifestaciones muy importantes en varios países, debería hacer reflexionar a todas las administraciones -comunitaria, estatal y autonómicas- acerca del necesario cambio de rumbo de las políticas que están llevando a cabo en el sector y del trato que se da a sus profesionales”.
Unión de Uniones ha invitado al resto de organizaciones agrarias de ámbito nacional y a la organización de cooperativas para que se sumen a la movilización, invitación de la que hasta el momento no se ha recibido ninguna respuesta.