Las recientes precipitaciones han traído un alivio muy esperado al sector agrario español, especialmente para los cultivos de cereales, cultivos leñosos y pastos, según han señalado las principales organizaciones agrarias del país.
Desde ASAJA, se destaca que los efectos de las lluvias sobre los cereales son claramente beneficiosos, y los cultivos leñosos han disfrutado de temperaturas no excesivamente bajas, lo que ha favorecido una floración y cuajado positivos.
Por su parte, COAG señala un balance positivo para el campo, especialmente en los cereales y los cultivos leñosos de la mitad sur peninsular, destacando también el beneficio para los pastos y el aumento de reservas en muchos pantanos, lo que reduce la incertidumbre sobre el suministro de agua para el riego en los próximos meses.
UPA considera estas precipitaciones como una muy buena noticia para el campo, cambiando radicalmente las previsiones de los cultivos, especialmente de secano, como el cereal, el viñedo y el olivar. Además, remarcan que la ganadería se verá beneficiada con el crecimiento de los pastos y el adecuado suministro de agua para el regadío.
Aunque las lluvias han sido recibidas con optimismo, las organizaciones agrarias instan a mantener la vigilancia sobre la evolución del clima en los próximos meses de primavera. En regiones como Cataluña y la cuenca mediterránea, donde las lluvias no han sido tan abundantes, la situación sigue siendo preocupante.
Por ello, sigue siendo imprescindible seguir reforzando las inversiones en regadío y adaptando el sistema de seguros agrarios a estas nuevas condiciones climáticas ya que es fundamental aprovechar cada gota de agua y evitar su desperdicio en un escenario marcado por la variabilidad climática.